El buque Juan Sebastián de Elcano fue botado el 5 de marzo de 1927, siendo madrina Carmen Primo de Rivera, hija del presidente del Gobierno, y con la presencia del almirante Cornejo como ministro de Marina. La vistosa ceremonia fue recogida por la prensa de la época. La Marina recibió el barco el 29 de febrero de 1928, con las formalidades de rigor, haciéndose cargo del buque ante la presencia del ministro, el vicealmirante Eliseo Sanchiz, comandante general del Arsenal de la Carraca. Su primer comandante sería el capitán de fragata Manuel de Mendivil que había sido precisamente el último de la Nautilus. Las características y dimensiones del buque recién entregado eran: eslora 94,13 metros; manga 13,10; puntal 8,68. El casco y los dos palos mayores construidos totalmente de acero, siendo su desplazamiento total de 3.420 toneladas tipo y 3.754 a plena carga. Se le había montado una potente estación radiotelegráfica para largas distancias y para precisar la navegación contaba con una aguja giroscópica Perry, una mesa trazadora de derrota y una corredera Salt. Todos estos instrumentos fueron mejorados y perfeccionados en el transcurso del tiempo, sobre todo tras las grandes obras de modernización realizadas en el arsenal de la Carraca en 1956 y 1978. Hoy cuenta con modernísimas instalaciones, radar, aire acondicionado, grandes frigoríficos y soportes informáticos. A su entrega el buque contaba con un motor auxiliar diessel de 800 caballos (después se mejoraría) y su aparejo era de bergantín goleta con cuatro palos bautizados con los nombres de "Blanca", "Almansa", "Asturias" y "Nautilus" en recuerdo de los buques escuela que le precedieron. En las pruebas de vela demostró tener excelentes condiciones marineras a pesar de haberlas realizado con vientos duros que obligaron a una recogida de aparejo. Las pruebas de velocidad y de consumo resultaron también satisfactorias. Dos liverpools o talametes dividen la larga cubierta principal -entre la popa y el castillo- en tres cubiertas a un nivel inferior. Puentes de unión entre los liverpools comunican el castillo y la cubierta de popa sin que sea necesario descender a cubiertas inferiores. Las importantes reparaciones que se llevaron a cabo en 1956 y 1978 permiten que siga en perfectas condiciones a pesar de ser el buque escuela más antiguo del mundo. Tiene el radar situado en cubierta delante del trinquete. La cúpula de la radio por satélite junto a tres antenas está ante el palo mayor.
El buque Juan Sebastián de Elcano fue botado el 5 de marzo de 1927, siendo madrina Carmen Primo de Rivera, hija del presidente del Gobierno, y con la presencia del almirante Cornejo como ministro de Marina. La vistosa ceremonia fue recogida por la prensa de la época. La Marina recibió el barco el 29 de febrero de 1928, con las formalidades de rigor, haciéndose cargo del buque ante la presencia del ministro, el vicealmirante Eliseo Sanchiz, comandante general del Arsenal de la Carraca. Su primer comandante sería el capitán de fragata Manuel de Mendivil que había sido precisamente el último de la Nautilus. Las características y dimensiones del buque recién entregado eran: eslora 94,13 metros; manga 13,10; puntal 8,68. El casco y los dos palos mayores construidos totalmente de acero, siendo su desplazamiento total de 3.420 toneladas tipo y 3.754 a plena carga. Se le había montado una potente estación radiotelegráfica para largas distancias y para precisar la navegación contaba con una aguja giroscópica Perry, una mesa trazadora de derrota y una corredera Salt. Todos estos instrumentos fueron mejorados y perfeccionados en el transcurso del tiempo, sobre todo tras las grandes obras de modernización realizadas en el arsenal de la Carraca en 1956 y 1978. Hoy cuenta con modernísimas instalaciones, radar, aire acondicionado, grandes frigoríficos y soportes informáticos. A su entrega el buque contaba con un motor auxiliar diessel de 800 caballos (después se mejoraría) y su aparejo era de bergantín goleta con cuatro palos bautizados con los nombres de "Blanca", "Almansa", "Asturias" y "Nautilus" en recuerdo de los buques escuela que le precedieron. En las pruebas de vela demostró tener excelentes condiciones marineras a pesar de haberlas realizado con vientos duros que obligaron a una recogida de aparejo. Las pruebas de velocidad y de consumo resultaron también satisfactorias.
ResponderEliminarDos liverpools o talametes dividen la larga cubierta principal -entre la popa y el castillo- en tres cubiertas a un nivel inferior. Puentes de unión entre los liverpools comunican el castillo y la cubierta de popa sin que sea necesario descender a cubiertas inferiores. Las importantes reparaciones que se llevaron a cabo en 1956 y 1978 permiten que siga en perfectas condiciones a pesar de ser el buque escuela más antiguo del mundo. Tiene el radar situado en cubierta delante del trinquete. La cúpula de la radio por satélite junto a tres antenas está ante el palo mayor.